Los libros de Donna Leon te envuelven en el ambiente denso de una Venecia decadente: sus malos olores, su decadencia arquitectónica, los abusos inmobiliarios. Donna Leon no solo nos ofrece un fresco de una Venecia agobiante, sino que su conciencia social hace, de esta escritora, un referente necesario en la novela policiaca contemporánea.
La muerte envuelve este ambiente opresivo de prostitución masculina, homosexualidad, travestismo, abusos inmobiliarios, corrupción. Las apariencias engañan, como nuestra Venecia, y bajo la honorabilidad se esconde la depravación moral, la avaricia, la insolidaridad. Esta novela es una gran alegoría de su ciudad. Donna Leon es Venecia, como Venecia es Donna Leon.
Ahora me pregunto si seré capaz de volver a Venecia y no mirarla con los ojos de Brunetti, me temo que, eso, ahora, es sencillamente imposible.
Excelente novela de nuestra gran autora que podéis encontrar en Seix Barral. Podéis ver que no me extiendo mucho, prefiero que leáis. Os dejo la sinopsis:
Fecha de publicación: 13/06/2000
288 páginas
Idioma: Español
ISBN: 978-84-322-2838-4
Código: 913290
Formato: 13,3 x 23 cm.
Presentación: Rústica con solapas
Colección: Biblioteca Formentor
Un travesti ha sido asesinado y su cuerpo aparece con el rostro desfigurado. Quizá otra víctima anónima para el registro de crímenes sin resolver. Pero el comisario veneciano Guido Brunetti, obedeciendo a su infalible instinto, descubre que ese hombre vestido de mujer es Leonardo Mascari, director del Banco de Verona y respetable ciudadano en Venecia. Podría ser un simple caso de doble vida para uno que frecuentaba los circuitos de prostitutas y travestidos, pero los indicios delatan que hay algo más en esta nueva e intrigante historia de Donna Leon. Su personaje, el comisario Brunetti, considerado por la crítica como «el heredero del Maigret de Simeon» y «el comisario con mayor carisma» de este género literario, encuentra a un abogado del Vaticano y activo miembro de la Lega della Moralità –asociación destinada a perpetuar la fe, la familia y las virtudes morales- en el apartamento de un chapero llamado Crespo. Y poco a poco se enfrenta a una trama en la que están implicados los niveles más altos del mundo financiero, gubernamental y eclesiástico.
Un blog sin respuestas no es un blog. Leer y callar, leer y callar.. me ronda, me incomoda,me desasosiega la pasividad.
ResponderEliminarNo se me ocurre una introducción mejor para "volver" al lugar del que nunca me marché.
¿Dónde coño he estado? Me revienta la pregunta porque no tengo ni la más remota idea.
Repaso la lista de los últimos libros que he leído cual ratón en su rueda, empecinada en pensar que eso me da algunas respuestas pero tampoco.
La mujer difícil de Irving, El diario de Invierno de Auster, a Javier Marías(otra vez), El abuelo que saltó, y a punto de acabar Libertad de Franzen.
No sé para que sirve mi lista pero necesito tenerla presente, como si no quisiera olvidar, como si quisiera aprehender lo leído, adherirlo a mi piel y que me vaya configurando de alguna manera, que me vaya enseñando a vivir aunque sepa que esto último no es posible.
No sé si esto es una forma de presentarse adecuada más ahora que pasaré por el sesgo de "El censor" JA¡¡¡ pero es mi necesidad.
Me hace feliz transitar este espacio, sea pues.
Otro día hablaremos de libros, por ejemplo JA¡
Hoy me muevo nerviosa porque intuyo que alguien tiene pensado para mi un ebook, es un cambio que me ilusiona y da miedo a la vez, suena infantil pero me resisto a renunciar al peso de los ejemplares en mis manos y al hecho de no poder pasar páginas.
Os cuento y comparto la felicidad que me aporta transitar este espacio
Que triste tener que ejercer de censor, pero uno de los comentarios que se hicieron sobre un autor fueron vomitivos. Decir que lo siento es mentira, me he visto obligado, este blog es un tributo a mi memoria, no me apetece que me violen sin mi consentimiento.
ResponderEliminarNunca nos vamos, pero los silencios a veces son tan importantes como las presencias. Yo hace mucho que estoy en un silencio meditado, y es complicado aceptarlo, pero el silencio me hace comprender que la realidad no es como yo quiero verla, simplemente es. Así que me encanta recibirte en mi mundo de alucinaciones.
El ebook me ha dado tanto placer que espero que puedas también tú soportarlo.