Montalbano en estado puro, auténtico, socarrón, con una vida interior intensa, difícil, intentando encontrarse a sí mismo mientras recorre los caminos del Mediterráneo.
Montalbano es genial, maravilloso y auténtico, sin
trampas. Reflexivo, duro, tierno y culto. Los personajes: Fazio, Catarella,
Mini, Ingrid, maravillosos, tópicos y reales.
Peor para ti.
lo tenemos en Salamandra, aquí os dejo la sinopsis:
CAMPO DEL ALFARERO, EL
Autor: Camilleri, Andrea
Colección: Narrativa
Título original: IL CAMPO DEL VASAIO
Traducción: María Antonia Menini Pagès
ISBN: 978-84-9838-356-0
Núm. pags.: 224
Tipo edición: Rústica
PVP: 14,50 €
En los pedregosos aledaños de Pizzutello, la lluvia ha devuelto a la luz un cadáver con signos de haber sido ajusticiado por traición. Sin huellas dactilares y con el rostro desfigurado, las características no se corresponden con las de ningún desaparecido. Y cuando Mimì Augello insiste de forma muy extraña en hacerse cargo del caso personalmente, las alarmas de Montalbano se encienden. Pese a que los molestos achaques de la edad lo tienen algo embotado, su infalible instinto lo lleva a no ceder las riendas y seguir adelante sin bajar la guardia. O tal vez el mejor estímulo sea la aparición en escena de Dolores Alfano, una mujer atractiva y seductora que denuncia la desaparición de su marido, de quien dejó de tener noticias poco antes de que embarcara hacia Sudamérica. Así, de manera gradual y casi imperceptible, dos casos en apariencia distantes empiezan a mezclarse, y Montalbano deberá devanarse los sesos y valerse de todo su ingenio para desvelar la trama oculta de una traición insospechada.
En esta decimoséptima entrega encontramos a un Salvo Montalbano con cierta tendencia a la misantropía, cada vez más entregado a sus momentos de soledad y a esos diálogos con su otro yo, que por una parte lo agotan y por otra le señalan el camino. Engañando a quien lo engaña, rebatiendo falsedades con nuevas falsedades, al final el verdadero temple del comisario resurgirá cuando renuncie a la gloria por lealtad a quienes ama. Quizá la vida no sea tan absurda, después de todo.
El campo del alfarero, o campo de sangre, es el lugar que compraron los sacerdotes, a fin de dar sepultura a los forasteros, con las treinta monedas de plata que Judas arrojó al suelo del templo antes de ahorcarse, desesperado por la magnitud de su traición.*
*según el Evangelio de san Mateo
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Debido a algún comentario improcedente que no respeta ni al autor del blog ni a los participantes del mismo, me veo obligado a moderar los comentarios. Disculpa las molestias.