miércoles, 2 de mayo de 2012

El coche de bomberos que desapareció, Brandbilen som försvann, Maj Sjöwall y Per Wahlöö

Cuando miro las estadísticas alucino con que haya algunas entradas con más de 500 visitas. Me parece alucinante que un montón de personas que no conozco en absoluto se entretengan leyendo mi blog, y se paren a leer lo que pienso del último libro que me he leído.
Es cierto que el blog se ha convertido en una parte importante de mí, al menos en dos sentidos, el primero en que me ayuda a no perder contacto con los libros que me he ido leyendo,quedando algún tipo de constancia de lo que he pensado; en segundo lugar, es importante porque me obligo a escribir y a leer pensando y admirando a las personas que han trabajado tanto para darme esos momentos de intimidad que tanto aprecio.
Este libro sigue la senda de los anteriores de la pareja sueca, el gusto por la investigación criminal, la importancia de la carga de la prueba, la deducción racional, el trabajo policial en armonía huyendo de la intuición poco verosímil de la novela policíaca anterior. No existe un único personaje que centralice la acción, sino que la acción se deriva en varios personajes, centrándose en apartados concretos que nos enseñan varios modelos psicológicos a la hora de enfrentarse al crimen.Así pues vuelve a ser una novela coral que da al lector suficientes argumentos para pasar un rato entretenido y agradable.
En fin, os dejo la sinopsis de RBA editores:
Una extraña concatenación de suicidios y accidentes acaba con la vida de los miembros de una banda de vulgares ladrones de coche. Uno de ellos yace muerto sobre la cama, hecha y limpia. Dos policías rompen la cerradura y penetran en la casa. Tan sólo hay dos palabras escritas junto al teléfono: Martin Beck. El inspector-jefe de la Brigada de Homicidios de Estocolmo ignora qué hace esa anotación con su nombre en aquella habitación. A pocos kilómetros, uno de sus hombres está a punto deconvertirse en héroe, Gunvald Larsson. A medianoche el edificio que vigila salta por los aires. Cuatro muertos y un sinfín de heridos que saca del fuego con sus propias manos. Dos ladrones y dos prostitutas han fallecido. Uno ya lo estaba mucho antes de las llamas. Otro suicidio. ¿Qué está pasando? El rastro de uno de los fallecidos le conduce hasta una banda internacional de tráfico de coches robados. Pero, ¿qué tiene que ver Martin Beck? ¿Quién es el exterminador?

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